sábado, mayo 08, 2010

EL VALIOSO TIEMPO DE LOS MADUROS




He gastado ya, cuatro años de mi jubilación, que han pasado como una exalación, en la lucha por conseguir un objetivo, al lado de lo que parecía un grupo de amigos, que al final ha quedado muy reducido, ya que algunos han resultado amigos de "mantel", y ya lo dice el refrán: "Amigo de mantel, no te fies de él"
Así que decidí que había llegado la hora de jubilarme de verdad y de todo, de manera que arrojé mi agenda 2010 a la papelera y pasé por primera vez en mi vida, a disponer de todo mi tiempo.
Es verdad que los primeros días, me costó adaptarme, pasar de una actividad frenética, a no tener nada que hacer, parecía que me resultaría un poco duro.
Pero pronto comenzé a sentir y disfrutar esa agradable sensación que resulta, de no tener que mirar ni el reloj ni el calendario, cada mañana.
Un día despiertas a una hora, el siguiente a otra distinta, da igual, la ducha, el afeitado el desayuno con Bienve, que ahora es mas relajado, porque no hay prisa de ninguna clase y después el paseo con mi mascota Whisky.
También él, ha salido ganando con mi decisión, sus paseos, antes de 20 minutos, han pasado a durar tres horas.
De casa a la Ronda Bellavista, Parque del Turó, Via Europa y primer descanso en el parque central nuevo, bajamos por la Riera, San Antonio y ya estamos disfrutando él de la arena y yo del rumor de las olas, que lamen las playas de nuestra ciudad, un nuevo descanso y vamos a parar a la arquera Laia, otro nuevo descanso y ahora sí, de nuevo para casa.
Hay días que cambiamos ligeramente el circuito, y otros el sentido de la marcha, según se nos antoje a uno de los dos

1 comentario:

Joana dijo...

Y tu cara, refleja ese estado. Doy fé de eso!