lunes, abril 14, 2014

NOS ENGAÑARON


Llevábamos razón, nos engañaron. Desconfiamos desde el comienzo, de una constitución  tutelada por el franquismo, con un rey puesto a dedo por el mismísimo Franco.

Nos vendieron la moto, nos dijeron que era una constitución elástica y por lo tanto abierta a futuros cambios. Ellos vendieron su alma, a cambio de 40 monedas, aceptaron una monarquía que los españoles habían rechazado en las urnas y aceptaron una bandera manchada de sangre de miles de inocentes.

Luego dijeron que no eran monárquicos, pero reconocían que se habían vuelto Juan Carlistas. Todo por el bien de la patria. (la suya). Durante un montón de años nos han engañado con demasia-das cosas. Se vanaglorian del cambio, faltaría más. Se necesitaba bien poco para llevar a cabo unos pequeños cambios que por pocos que fueran tenían que sacarnos de la época de penuria y miseria en la que nos metieron desde el mismo momento en el que dieron el golpe de estado y la incruenta guerra civil, de la que aún siguen empeñados en que no cicatricen las heridas.

Pero si miramos a los países de nuestro entorno (como nos dicen ellos) estaremos todos de acuerdo en que no hemos reducido las distancias, sino todo lo contrario.

Ahora muchos años después, se demuestra claramente que aquel acuerdo cuartelero, no nos ha dejado avanzar, ni política ni culturalmente, hacia una homologación con el resto de Europa.

Ahora los principales culpables de todo, han vuelto de nuevo con la religión en una mano, y en la otra una constitución de la que primero renegaron y ahora resulta ser la biblia. Envueltos en "su" bandera y usando una mayoría absoluta que la izquierda le puso en bandeja de plata, estamos otra vez en la dictadura, esta vez sin pegar un solo tiro. 

Arropados por el grupo de palmeros de la prensa del país, hacen y deshacen, recortando las veces que se le antojen, los pocos derechos que a fuerza de mucha lucha se habían conseguido.

Ahora resulta que la constitución que ellos rechazaron y no votaron, les viene como anillo al dedo para llevar a cabo todos los desmanes que a ellos se les antoje. Se han dado cuenta que Franco llevaba razón. Todo queda atado y bien atado, definitivamente se debe estar revolcando de risa.

Los padres de la constitución nos engañaron, solo buscaban su beneficio, eran impotentes, para sacar algo más. Ahora nosotros nos negamos a aceptar el engaño, porque reconocerlo nos obligaría a luchar por recuperar lo perdido, y eso tal como nos han aborregado parece harto difícil.

Mientras, los republicanos seguimos soñando con el día en que los Borbones abandonen en paz y definitivamente un país del que ya los echaron más de una vez.