UN CAFE CON BARON

El pasado día 21, en el local de la c/Valencia, los socialistas de Cerdanyola, tuvimos una vez mas la oportunidad de tomar un café con el alcalde. Digo una vez mas, porque son ya varias sus visitas con el fín de explicarnos de una forma directa y amena, las diferentes actuaciones de su gobierno, en el presente y lo que también se proyecta sobre el futuro de lo que nos atañe a los ciudadanos en general y a los de Cerdanyola en particular.
Cuando esperábamos en el local el comienzo del acto ocurrió algo inusual, una sra. entra dentro del local con un bandera de España precostitucional y nos dice a los presentes, ¡¡España, una y libre¡¡ y sin mas palabra abandona el local, luego algo mas ocurrió fuera pero la verdad es que no lo seguí, ni siquiera me interesó enterarme.
Seguramente quizo provocar sin saber la pobre mujer, que no insulta quien quiere, si no quien puede, o tal vez fué un gesto de gracia en el intento de hacer reir a sus "camaradas", el caso es que ninguno de los presentes le hicimos ni el más mínimo caso y salió tal como entró.
Pero el hecho de no hacerle caso, no quita que no reflexionara sobre el asunto, ¿ a santo de qué viene a nuestro local a provocar? ¿que esperaba, un enfrentamiento con alguien ? ¡se equivocó¡
pero también se equivocan los que con sus proclamas están insuflando a personas que ni saben ni han sabido lo que es y mucho menos lo que ha sido eso que ellos llaman "ESPAÑA"
Nunca es tarde para casi nada, pero estas personas en su mayor parte, sí han hecho tarde, en el ocaso de sus vidas aún no han aprendido ni siquiera a pensar por ellos mismos y se han tomado la política como un encuentro de futbol, rivalidad, confrontación, humillación (si se puede) y sobre todo provocar al enemigo. Se equivocan una vez vez mas, la política no es confrontación, es aportación, aportación de trabajo, de argumentos y todo cuanto suponga la mejora de nuestra sociedad, por eso ninguno le contestamos, nosotros estábamos allí para trabajar para los demas,
no para enfrentarnos a nadie. Así que recordé unos versos aunque en otro sentido... se equivocó la paloma...se equivocó.

¿Valió la pena?

Aunque particularmente creo que SIEMPRE, vale la pena luchar por la transparencia, en el caso de EPMA, la verdad es que después de todo lo pasado, no me ha quedado claro, si realmente lo ocurrido ha servido para algo. Hay personas que jamas aceptan el error cuando procede de ellos y lo peor es que encima el como de su cinismo les hace echar la culpa a otros de lo que solamente ellos son culpables. Otras que ni siquiera quieren saber la verdad de lo ocurrido, porque le es imposible aceptarla, sobre todo cuando la que descubren no es la que quisieran ver.

Me cuesta entender que personas que crees con un cierto nivel, no hayan sido capaces de hacerle ver a los dos promotores de la idea de arrancarle la antiguedad a los socios, que eso llamándole suavemente es una ARBITRARIEDAD, aunque personalmente creo, que fué la ocasión que alguien vió, para que nunca se supiera donde ha ido a parar el dinero malgastado.

Otros, no han querido saber lo que ha pasado, por lo visto a ellos la entidad, les ha traido sin cuidado, ellos solamente venían a "pasárselo bien haciendo teatro" como si tener los libros en regla y ponerlos a disposición de quien los pida y tener eso que se llama transparencia, les impidiera disfrutar. No, no engañan a nadie, esa es la excusa, para salirse con la suya, si tanto les daba igual, ¿ porqué no pedían que a los que sí nos interesaba, pudiésemos recuperar la antiguedad que nos han robado?

Algunos porque han disfrutado de prerrogativas, de ventajas, los que han estado siempre al lado de Rivelo, los que se han beneficiado económicamente de situaciones que nunca se debían de haber dado, ¿ para que quieren ellos saber, que hay facturas de cosas que se han comprado y no han ido al teatro ?

Y por último, los que mas penan me dan, los que reconociendo que teníamos razón no han podido manifestarlo por "compromisos sociales", los que reconocen públicamente delante de 40 perso-nas, "que todos sabíamos que no habían libros"; ¡¡claro que todos lo sabíamos ¡¡, ellos mismos los reconocieron en la reunión de los 11, pero unos no hemos querido apoyar la indecencia que signi-fica "FALSIFICAR" los libros para llevar el agua a su molino y otros lo han visto bien, con tal de conseguir el objetivo de que nunca sepamos la verdad de los libros y donde a ido a para el dinero.

Para mí, y para todos los que han querido verlos, está clarísimo que han cometido un montón de irregularidades, que que ninguna ha sido ni casual, ni inocente, todas han ido encaminadas a la consecución de un único objetivo NO DAR CUENTAS, PARA QUE NO SE SEPA LA VERDAD. Ahora ya ha quedado demostrado que personas que se les llena la boca de eso que ellos tan pomposamente llaman "dignidad", desconocen hasta el color que tiene.

Actas falsificadas para nombramientos, dimitir en una asamblea delante de todos y luego volverse atras; no registrar la junta electoral, como era su obligación, para luego engañar en el registro; reirse de la ley 7/97, para luego echar mano de ella cuando le ha interesado; montar preguntas en asambleas a las que solo han invitado a los que han querido; eliminar personas de las listas de socios y aumentarla hasta tener la sarten por el mango; para que seguir han quedado retratados para siempre.

A mí, ya no me hacen falta veredictos de jueces, las cosas son tan claras y tan evidentes, que me da hasta risa, cuando ellos mismos se dicen "somos personas decentes", a las personas decentes, lo que mas les interesa cuando se pone su honradez en entredicho, como en este caso, es demos-
trar con la mayor urgencia que las facturas que les he pedido, estaban a mi disposición, que el libro que dicen haber "pasado a limpio", es la copia exacta del viejo y que todo lo que ahora ya quedará para siempre en la penumbra, salvo que ocurra un milagro, han tenido la ocasión de aclararlo, pero nó, han preferido no demostrar nada, porque no podían demostrar NADA. Así que lo peor que les podía pasar de verdad si se consideran inocentes, les ha pasado, ya jamás podrán demostrar su inocencia, esa será por siempre la peor de las condenas, en el aire queda por los siglos de los siglos.

Por lo demas el tiempo pone a cada uno en su lugar, a los que hemos intentado la transparencia, la democracia, la participación y la honradez y los que se han refugiado en compromisos sociales y han preferido mirar para otro lado, porque no les gustaba lo que estaban viendo, claro que eso suele ocurrir, hubo muchas personas que se negaron a creer en los hornos crematorios del holo-causto.

De otros prefiero ni hablar, particularmente para mí, ¡¡¡¡¡ que desilusión ¡¡¡¡¡... tenía puestas tantas esperanzas en el cambio, que me hice la ilusión de que se avecinaba una ola de "aire fresco",... el anticiclón no lo permitió , que le vamos ha hacer. Ya no merece la pena seguir, simplemente "los he borrado de mi agenda".