Los "Cuatro jinetes del Apocalípsis" cabalgan de nuevo lanzando sus mensajes de terror para esas clases que ellos han tratado siempre de "chusma" a los que creen más fácil de engañar, ya que la "chusma" o el populacho cuando a ellos les conviene, son los que por su desconocimiento les dará los votos necesarios para hacerse con el aparato del estado, sin darse cuenta que les dan un cheque en blanco para que desde el gobierno ejerzan la tiranía que más convenga a los intereses del capital que les sostiene y financia.
Sánchez, Casado, Rivera y Abascal a lomos de briosos caballos de la acreditada ganadería del IBEX 35, recorrerán la piel de toro durante 15 días frenéticos, sin disfrutar apenas de los lujos de las grandes hospederías del reino que rivalizarán en acogerlos gratuitamente si falta hiciere. Llevando la buena nueva metiendo el miedo en el cuerpo a todos cuantos les presten oídos y quieran votarlos.
Los cuatro llevan en su programa como santo y seña, "o ellos o la hecatombe", el fin de la democracia, el artículo 155, que les permitiría meter en cintura a los catalanes y de paso para gobernar de una manera fácil a base de quitar a quien y lo que a ellos les convenga.o sea lo que hacía un tal Paco hace unas decenas de años que tantos parecen que añorar los españoles. A los que han hecho creer que todos sus males son causados por los catalanes, que quieren poder decidir por ellos mismos su futuro. El otro 50% de la culpa se lo cargan los emigrantes, que han venido a limpiarle la mierda a muchos cientos de viejos jubilados que no habrían tenido ni siquiera que lees hiciera caso.
El resto de los problemas ni siquiera se entretienen en exponerlos y ofrecer soluciones, lo primero es la unidad del la patria, aunque esta sea impuesta desde tiempos inmemoriales. Y esto hay que conseguirlo aunque sea a la fuerza y pagando la factura que sea necesaria. Para ello usan su mejor arma "la mentira". A base de practicarla han llegado ha mentir con tanta naturalidad que al final ni ellos mismos saben diferenciar la verdad de lo que ellos predican. Hasta pasa que lo único que hacen es mentir algo diferente cada día para que al final no se pueda ni siquiera recordarlas,
Pues bien, a pesar de los esfuerzos de estos cuatro hidalgos y de su trupe de palmeros, los catalanes siguen y seguirán en sus trece con contar votos y no porrazos de lo que llamamos y así debería ser fuerzas del orden público que debería estar para defender a los ciudadanos en lugar de abrirles la cabeza o vaciarles un ojo, con pelotitas de goma que por cierto en Catalunya están prohibidas por "ley".
Según parece los catalanes seguirán intentándolo nuevamente, a no ser que los cuatro jinetes junten temporalmente sus fuerzas para violar, una vez más a Catalunya, instaurando de nuevo ese artículo tan feo al que tanto cariño parecen haberle tomado, pero que nada tiene que ver con una verdadera democracia, El artículo 155 no logrará de una manera definitiva hacer renunciar de sus principios a varios millones de votantes que pase lo que pase seguirán su lucha por la libertad el derecho a integrarse en una Europa donde sean respetados por igual todos sus derechos-
Las mentiras por mucho que se repitan tienen una fecha de caducidad, ya no se mantiene en pié, una de las que al principio predicaban con más vehemencia para asustar a los votantes catalanes era la imposibilidad económica de Catalunya. Hoy ya los economistas han reconocido que se puede mantener y mejorar su situación valiéndose pos sí misma, y comienzan a alertar de lo contrario cuando se dan cuenta que son ellos, los que no podrían pagar el PER de Andalucía, si los catalanes se van.
Respecto a los emigrantes deberían comenzar a explicarles a sus votantes sobre todo a los jóvenes, que llegará un día cada vez menos lejano que los emigrantes que ahora rechazan serán solicitados por los mismos que ahora los rechazan y desprecian. Con la caída del índice de natalidad, se reducirá la población y con ello decaerá, el consumo, que arrastrará al paro a millones de trabajadores y a los gobiernos a reducir la recaudación de impuestos al tiempo que subirá el importe de las prestaciones por desempleo, lo que traerá consigo un aumento del déficit y la reducción de servicios.
Si a todos esto le añadimos la falta de interés para acabar con la lacra de la corrupción de esta burocracia funcionarial a los que los políticos han dejado campar a sus anchas por todas las instituciones debido a su propia ineptitud y falta de conocimientos fruto de tanto máster regalado durante tantos años.
Tampoco veo que ninguno de los cuatro lleve en su programa la forma de afrontar los efectos de la nueva revolución tecnológica en la que nos vemos inmersos, que hará inservibles millones de trabajadores en los que habrá que invertir muchos millones para reconvertirlos en útiles para la nuevas formas de trabajo.
Está claro que no tienen programas o no interesa discutirlos, así que mejor tirar por el camino más fácil y a seguir persiguiendo catalanes y vascos, ellos son la panacea de todos los males que padecen los españoles. Como decía un poeta andaluz "A la miseria se le tapa la cara con toros, bailes y ferias"
Las mentiras por mucho que se repitan tienen una fecha de caducidad, ya no se mantiene en pié, una de las que al principio predicaban con más vehemencia para asustar a los votantes catalanes era la imposibilidad económica de Catalunya. Hoy ya los economistas han reconocido que se puede mantener y mejorar su situación valiéndose pos sí misma, y comienzan a alertar de lo contrario cuando se dan cuenta que son ellos, los que no podrían pagar el PER de Andalucía, si los catalanes se van.
Respecto a los emigrantes deberían comenzar a explicarles a sus votantes sobre todo a los jóvenes, que llegará un día cada vez menos lejano que los emigrantes que ahora rechazan serán solicitados por los mismos que ahora los rechazan y desprecian. Con la caída del índice de natalidad, se reducirá la población y con ello decaerá, el consumo, que arrastrará al paro a millones de trabajadores y a los gobiernos a reducir la recaudación de impuestos al tiempo que subirá el importe de las prestaciones por desempleo, lo que traerá consigo un aumento del déficit y la reducción de servicios.
Si a todos esto le añadimos la falta de interés para acabar con la lacra de la corrupción de esta burocracia funcionarial a los que los políticos han dejado campar a sus anchas por todas las instituciones debido a su propia ineptitud y falta de conocimientos fruto de tanto máster regalado durante tantos años.
Tampoco veo que ninguno de los cuatro lleve en su programa la forma de afrontar los efectos de la nueva revolución tecnológica en la que nos vemos inmersos, que hará inservibles millones de trabajadores en los que habrá que invertir muchos millones para reconvertirlos en útiles para la nuevas formas de trabajo.
Está claro que no tienen programas o no interesa discutirlos, así que mejor tirar por el camino más fácil y a seguir persiguiendo catalanes y vascos, ellos son la panacea de todos los males que padecen los españoles. Como decía un poeta andaluz "A la miseria se le tapa la cara con toros, bailes y ferias"
