La derrota de Trinidad Jimenez, en las primarias del PSM, es una muestra más de la soberbia, del sistema en el que se ha enquistado el funcionamiento de los partidos a la hora de quitar y poner candidatos.
Ejecutivas nombradas a gusto de los los o tres indivíduos, que se hacen con las riendas del poder a base de prebendas hacia los lameculos,palmeros y garrapatas, que por desgracia existen en todos los partidos.
Un sistema corrupto y antidemocrático, que ni siquiera respeta el trabajo y la opinión de las bases, a las que hacen comulgar con ruedas de molino, según van sus intereses y a las cuales solo les toca, callar o marcharse.
Ahora se dirá que es un fracaso de Zapatero, está de moda echarle las culpas al primero que pasa, ha sido y será una forma de ser de los políticos españoles, desde la mismisima edad media.
Pero el fracaso es de todos, cualquiera que pertenezca o haya pertencido a cualquier partido y haya participado de una manera directa en la política, sabrá que es lo mismo que pasa en todas las ejecutivas de todos los partidos, comenzando a nivel local, en Mataró tenemos un claro ejemplo, solo hay que usar la hemeroteca.
Ya era hora, espero que al menos los partidos de izquierda, tomen la debida nota, limpien esta casta que se ha instalado en todos los organismos del poder, y pasen éste a las bases de una manera definitiva, de lo contrario el desafecto irá en aumento.
1 comentario:
Una democracia no es digna de llamarse así si los partidos políticos no son democráticos. ¿Cómo pueden construir la democracia organizaciones que son dictatoriales?
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