domingo, agosto 15, 2010

MATARO CIUDAD TURISTICA





Siempre que viene a visitarme algún amigo de fuera de Mataró, me gusta llevarlo a la Villa Romana de Torre Llauder, ya es la segunda vez que nos ocurre lo de ayer, no se puede entrar, si no pasas pisando el inmenso charco que forma una gran piscina, justo delante de la entrada.
Está claro que a nuestros políticos, le importan un bledo, los turistas y la opinión que se puedan hacer nuestros visitantes, ayer había varios extranjeros.
Si no pueden arreglarlo, al menos que pongan un cartel indicador, diciendo que el charco formaba parte de las termas romanas de la vila, a ver si tragan.
Mataro Ciudad Mediterránea.

1 comentario:

Cronos dijo...

El equipo de gobierno, en el 2005 se descolgó con lo de " L’Ajuntament de Mataró s’ha proposat convertir Mataró en una potent destinació turística." Los que lo oíamos, pensabamos: ¿Potente? ¿Mataró? ¡Vamos, hombre! ¡Estos tios sueñan!. Luego montaron lo de la "Rutal del mar" (desaparecida en combate). No contentos con eso, insistieron: Cada año, lo mismo con el Turismo. Finalmente, en el 2007 ya habían cambiado la letra pero no la música, ahora la ciudad atraía por su "importante ruta modernista" y por ser un "sitio donde la gente viene a comprar" (Alicia Romero dixit). Comenzaban a soplar los vientos del corte inglés y con ello pensaban cambiar no solo la actividad economica si no, también, convertirlo en reclamo turístico.

Este año, la oficina de turismo local ha atendido un 17% menos de gente que el año pasado. Asimismo, la mayoría de los que utilizaron el servicio son de ciudadanos de la ciudad.

Hace tiempo que el equipo municipal dice cosas sólo de cara a la galería porque hay que decirlas, pero desde el principio saben que no hay posibilidades, aún así encuentran un malsano placer en autoengañarse hasta creerse el cuento y convertirlo en dogma en el que se gasta mucho dinero en estudios y proyectos, tanto que luego no queda para poner un desagüe para evitar que cada vez que llueva, la entrada de la torre llauder, vestigio emblemático de nuestro pasado romano, se convierta en una piscina.

En cualquier empresa privada, a un directivo que hubiera hecho unos planes como los del turismo de Mataró y obtenido unos resultados tan nefastos, haría tiempo que lo habrían enviado a la cola del INEM por inepto y con la recomendación de dedicarse a la cria y cultivo del berberecho canibal del Amazonas. Pero en el equipo del Sr. Baron no dimite nadie. Ni siquiera por vergüenza torera.